Es curioso lo mucho que pueden darnos los animales a nosotros y lo poco que hacemos por ellos. Sé que esta frase es injusta para todos aquellos que amamos a los animales, incluso para aquellos que, sin ser muy fans de nuestros amigos de cuatro patas, los respetan y ayudan si pueden hacerlo. Pero la realidad es que si hablamos de forma generalizada, por desgracia, esa frase es de lo más realista. Nos dan compañía, amor incondicional, diversión e incluso a veces salvan nuestras vidas, y el mundo a veces les da a cambio dolor, abandono, contaminación y desprecio. Pero hoy, además, queremos demostrar que pueden darnos mucho más, vamos a hablar de perros que son nuestros mejores terapeutas.
Los perros son nuestros mejores amigos, eso se lleva diciendo desde tiempos inmemoriales, pero además son fantásticos doctores, psicólogos y rescatistas.
Casi todos los canes pueden ser entrenador para salvar vidas, encontrar explosivos o droga, ser animales guía e incluso para facilitar la mejoría de personas con ciertos trastornos mentales o físicos. No obstante, hay algunas razas que, debido a su inteligencia, son más aptas para según qué cosas:
- Pastor Alemán
- Labrador Retriever
- Border Collie
- Golden Retriever
- Caniche
- Doberman Pinschier
- Sabuesos
Es por esto por lo que es más fácil ver a este tipo de razas formando parte de grupos de terapia o siendo entrenados como perros guía. Sin embargo, en Perros Terapéuticos, afirman que prácticamente cualquier animal puede ser educado y entrenado para casi cualquier cosa, salvaguardando casos especiales o animales problemáticos.
Diferentes terapias con animales
En Santa Lucía, Cartagena, se puso en charcha hace un año el proyecto “Doctor Guau” con cinco perros entrenados para apoyar a menores. Con este proyecto se pretendía facilitar la mejoría de los niños hospitalizados y disminuir la ansiedad y el estrés que sufren los pequeños. A día de hoy se puede decir que el proyecto ha sido todo un éxito: han ayudado a cientos de niños a superar el trauma hospitalario, así como ciertos conflictos emocionales y físicos. Y eso es sólo una parte de la terapia, pues también han mejorado casos de depresión, reducido la presión arterial de niños con este problema, aumentado su autoestima y mejorado su estado de ánimo.
En Madrid, otro proyecto con perros de terapia, ha conseguido ayudar a niños con disfasia. La terapia con perros para niños con este problema muestra resultados prometedores: los investigadores observaron que los niños en el grupo de la terapia con perro parecían más motivados y abiertos a la comunicación. Además, los niños mostraron expresiones auténticas y naturales durante sus interacciones con el perro.
Otro proyecto que ha dado muy buenos resultados ha sido el llevado a cabo por los “terapeutas caninos Ras y Fox”, dos perros rescatados adiestrados para ayudar en la rehabilitación de pacientes alcohólicos. Al respecto, Eugenio Sánchez, un paciente de 65 años, indicó: «Lo que aprendo es lo que hace el perro, es decir, me fijo en otros estímulos para superar aquellos que nos incitan a beber, como la ansiedad o la depresión”. Esta etapa preliminar comenzó en octubre y acaba de finalizar. En una próxima instancia, se proponen ampliar la investigación a 90 participantes y dividirlos de tal forma que algunos estén en contacto con animales y otros no, para poder dimensionar sus efectos.
El Centro de Educación Infantil y Primaria “Miguel de Cervantes de Lopera ha puesto en marcha, hace apenas 10 días, el programa “Pasea Conmigo”, para ayudar a niños y niñas con capacidades especiales. El programa consta de 15 sesiones de 45 minutos cada una basadas en la interacción y el vínculo entre una persona y un animal debidamente seleccionado y entrenado, para la consecución de unos objetivos educativos marcados por profesionales de la educación y que sean expertos en la introducción de animales en estos contextos.
Y para terminar, os cuento que la Fundación Adecco y la Asociación ESCAN han iniciado una colaboración para apoyar a mujeres víctimas de violencia de género en su acceso al empleo a través de terapia psicológica de recuperación asistida con perros de acompañamiento.
Y es que, los perros, pueden ser la mejor terapia.